El pintor Fernando Botero, originario de Colombia, pertenece a los más grandes pintores de su generación. Cualquiera que haya visto una pintura de él reconoce su estilo de entre miles: también se le llama el pintor de las personas gordas debido a sus personajes voluptuosos. A pesar de su edad avanzada, todavía coge sus pinceles todos los días. Justo antes de la apertura de una exposición importante en el museo Kunsthal en Rotterdam, A Quattro Mani hizo un retrato de él para el periódico Algemeen Dagblad en su estudio en Mónaco. Llegamos a conocer a un hombre modesto y entusiasta, que hoy es igual de apasionado por el arte como cuando era joven.